Una de cada cuatro fábricas de Galicia entra en la era de los robots
[Vía Faro de Vigo]
El sector lidera la aplicación de nuevas tecnologías en los procesos de producción -El gasto en TIC se dispara un 93% en la comunidad.
La diferencia entre sobrevivir, hacerse más grande incluso, y agonizar hasta la muerte cuando vuelva otra crisis como la que el mundo acaba de dejar atrás, la marca la tecnología. O, por lo menos, eso se esfuerzan en transmitir tanto los expertos como las administraciones para impulsar la economía inteligente. La Xunta, por ejemplo, lleva años ya con una apuesta en firme por la industria 4.0, con la que además espera que el sector vuelva en 2020 a alcanzar las cotas en el Producto Interior Bruto (PIB) que tuvo en sus años dorados, un 20% -ahora, junto con la energía, no llega al 17% y el segmento manufacturero se sitúa en el 12,4%-, y que ese sea el mismo peso que tenga en el empleo. Poco a poco cala la necesidad de adaptarse a la nueva realidad, tanto desde el punto de vista de la organización de las empresas, como del proceso productivo. Galicia se ha convertido en una de las comunidades de España más adelantadas a la era de los robots. El 12% de las compañías asentadas en la región cuentan, al menos, con uno, y en el caso de las fábricas el porcentaje roza el 25%, según la Encuesta de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) y del comercio electrónico de las empresas, publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que por primera vez incluye los datos sobre la robotización en el país.
En la construcción, el uso de este tipo de avances se queda en apenas el 1,6% y en los servicios asciende al 7,6% de las empresas gallegas, siempre entre aquellas que superan los 10 empleados. La inmensa mayoría, el 76% de las que disponen de robots, tira de máquinas para mejorar la cadena de producción, mientras que los de servicio están presentes en el 33%.
En el conjunto el Estado, las empresas de más de 10 trabajadores que utilizan robots ascienden al 10,9% del total y el 24% entre las industrias, que tocan sus cotas más altas en País Vasco y Navarra, con un 32,6% y un 31%, respectivamente.
El otro gran ejemplo de la paulatina concienciación en el tejido productivo sobre la importancia de las nuevas tecnologías está en la inversión. El gasto en TIC durante 2017 en Galicia superó los 271 millones de euros, lo que supone un 93% más que el ejercicio anterior y el importe más elevado desde 2013, cuando el INE empezó a ofrecer estos datos. Las pymes y grandes empresas de la comunidad desembolsaron 71 millones en bienes TIC, otros casi 64 millones en software, 114 millones en servicios de tecnologías da la información y telecomunicaciones y 22 millones más en otro tipo de gastos relacionados con nuevas tecnologías.
Eso sí, solo el 14% emplean especialistas en el manejo de las TIC y hay un 26% que no dispone todavía de web. De las que sí la tienen, solo el 14% permite hacer pedidos o reservas online. Dos de cada diez paga por anunciarse en internet. Y casi la mitad se ha lanzado a utilizar redes sociales, blogs, o websites para interaccionar con el consumidor. Aunque las posibilidades del llamado Big Data son inmensas, únicamente el 9% analizan los datos de usuarios para exprimir el negocio.