PSA Vigo compartirá con otras plantas su ensayo de exoesqueletos en la cadena
Atlántico
El centro de Balaídos concluirá a principios de julio el estudio para operaciones con brazos levantados
PSA Vigo está en la fase final del estudio (test en línea de Montaje) de un exoesqueleto, que asiste en las operaciones con brazos levantados (en concreto los puestos que se denominan bajo caja, que es el vehículo), trasmitiendo las cargas (el propio peso de los brazos) a las caderas y piernas a través de un eje vertical que hace las veces de columna vertebral. Desde la factoría explicaron que la finalización de estos test está prevista para inicios del mes de julio y sus resultados serán compartidos con el resto de las plantas de Grupo PSA.
El Centro de Vigo realiza este ensayo con la colaboración de CTAG (Centro Tecnológico de Automoción de Galicia) y de Mutua Universal.
Los exoesqueletos son dispositivos que facilitan asistencia a la actividad muscular de determinadas zonas anatómicas a través de medios activos (con energía) o pasivos (con redistribución mecánica a otras zonas musculares), contribuyendo así a la prevención de trastornos musculo-esqueléticos.
La colaboración de las tres entidades permitirá a PSA un análisis riguroso y en profundidad sobre las aportaciones de este tipo de dispositivos.
Grupo PSA aporta su experiencia en el proceso de fabricación en línea y en las mejoras ergonómicas, los expertos internacionales en exoesqueletos del área de procesos e innovación de CTAG analizan la apropiación y eficiencia en los procesos y los expertos del Laboratorio de Ergonomía de Mutua Universal desarrollan las técnicas de medición neurofisiológica de la actividad muscular por electromiografía de superficie y el análisis de movimiento 3D.
Una ayuda al operario
Desde PSA Vigo explicaron que antes de iniciar las pruebas, estos expertos (médicos, ergónomos, fisioterapeutas, psicólogos e ingenieros) definieron conjuntamente unos protocolos metodológicos con el fin de garantizar la coherencia entre los resultados finales del estudio y los objetivos buscados. Los protocolos se constituyeron en varias fases sucesivas con pruebas a superar. Según el responsable del Servicio Médico del Centro de Vigo, el doctor José Luis Martinez-Murillo Méndez, “lo primero que se le pide a cualquier dispositivo de este tipo es que suponga una ayuda para el usuario, facilitándole la realización de determinadas tareas, pero sin generar efectos contrarios para su confort o su salud”.
La responsable de Ergonomía de la planta, María Isabel Fontano Blanco, explica que, por esta razón, “es importante realizar estudios previos antes de adoptar este tipo de dispositivos, ya que no todos los dispositivos disponibles en el mercado resultan adecuados para el confort y la salud de las personas, al mostrar más inconvenientes para su uso que ventajas, como peso excesivo o incomodidad de uso”.
Los test realizados en el Centro de Vigo incluyen varias fases objetivas (mediciones técnicas) y subjetivas (análisis de la percepción de los usuarios tras su uso). Al final de cada fase de pruebas se realiza un balance de los resultados que se concreta en una decisión de “go” (continuar el estudio) o “no go” (no continuar el estudio y descartarlo).