Navantia plantea prejubilar a 1.300 empleados y poder contratar a 400 nuevos
[Vía La Voz de Galicia]
La empresa propone a sus sindicatos salidas anticipadas de su personal de 63 años, unos 550 en la ría ferrolana
Navantia comienza a deshojar la margarita. Desde febrero del 2017, cuando el anterior equipo de la sociedad estatal de participaciones industriales (SEPI anunció que pondría en marcha el plan de futuro de esta empresa, los trabajadores empezaron a hacer sus cábalas con el empleo, ya que todos los programas estratégicos han implicado salidas anticipadas y, en algunos casos, nuevas contrataciones. La dirección de los astilleros ha puesto encima de la mesa sus números o, lo que es lo mismo, cómo prevé cuantificar el adelgazamiento de la plantilla y también a cuántas personas está dispuesta a contratar para rejuvenecerla.
Es la primera propuesta presentada a los sindicatos en la mesa de negociación del plan, en lo referente al convenio único que persigue para sus astilleros, que apunta a jubilaciones anticipadas a los 63 años, y un volumen de 400 nuevas contrataciones, además de otras-que están sin cifrar- de carácter temporal.
Las prejubilaciones afectarían a cerca de 1.300 de los 5.500 trabajadores con los que cuenta actualmente la compañía que preside Susana de Sarriá, lo que implicaría un adelgazamiento de la plantilla de cerca del 24 %. En contraposición, está dispuesta a realizar 400 nuevas contrataciones, lo que dejaría a Navantia con 4.600 empleados, 900 menos de los actuales.
Aunque la empresa no desglosó a los representantes de los trabajadores qué número de profesionales tendrían que marcharse anticipadamente en cada zona geográfica en donde tiene sus centros, de la pirámide de edad de la plantilla de la ría de Ferrol se deduce que en esta comarca se jubilarán más de 550 personas, frente a las más de 430 de las factorías andaluzas, más de 200 en Cartagena y 40 en Madrid. Se desconoce, no obstante, qué reparto se haría de las nuevas contrataciones.
Posiciones alejadas
La negociación con los sindicatos, sin embargo, no ha hecho más que empezar, y la representación social de la compañía ya ha advertido que esa oferta está muy lejos de sus pretensiones. De hecho, los sindicatos cuentan con una plataforma unitaria consensuada en la que reclaman que se reponga todo el empleo que se amortice por la vía de las jubilaciones anticipadas y que estas se produzcan a medida que los trabajadores cumplan los 60 años.
En materia salarial, la dirección propone un incremento del 1,5 % general de las retribuciones, a aplicar desde el 1 de enero del 2018, un 0,25 % desde el 1 de julio de ese mismo año y un 20 % ligado a la productividad.
Navantia sostiene que el convenio colectivo único que están negociando «no es para perder derechos» y considera que la homogeneización de las condiciones entre los trabajadores de los antiguos astilleros civiles y mi litares se realizará de forma que «nadie gane ni pierda», sino que se acomoden los documentos.
El presidente del comité de empresa de Navantia Ferrol, Javier Galán, aseguró que este programa estratégico que se negocia no puede ser solo un «plan de reducción de plantilla», ya que implica un cambio de cultura en la compañía, con la aplicación del llamado modelo de astillero 4.0, más robotizado. «Nosotros defendemos que por cada salida de un trabajador se haga una entra- da», afirmó.
La intención de Navantia es la de pactar el plan industrial con los sindicatos antes de que finalice el presente año.