De escuela militar a investigar el mar
[Vía Atlántico]
El área científica de la ETEA ya está definida. Zona Franca centrará el Siemens en la industria del mar, el Faraday de la Universidad, para investigación y el Kelvin para Investigaciones Marinas. Todos esperan estar en obras en 2019
La transformación de la antigua ETEA en Teis para la ciudad va dando los últimos pasos para convertirla en un centro de excelencia en el conocimiento sobre el mar con la rehabilitación de tres edificios claves. Zona Franca convertirá el edificio Siemens en un centro para la industria marina, la Universidad de Vigo transformará el Faraday en un centro de investigación dentro del campus del mar y el Instituto de Investigaciones Marinas se trasladará en 2023 al edificio Kelvin. Todos confían en arrancar este año para el desarrollo de este área científica, después de que el Consorcio y la Universidad hayan dado un giro a sus proyectos tras la llegada de nuevos responsables.
Zona Franca ya tiene un preproyecto, realizado por la patronal del metal Asime con un horizonte de cinco años (año 2023), sobre qué quiere hacer en el edificio Siemens. El objetivo es crear un edificio centrado en la industria marina capaz de atraer tecnología y fomentar innovación para el desarrollo de productos y procesos propios para el sector, que permita a la industria del metal competir con valor añadido, pero también ser un centro de emprendimiento.
El proyecto, que tiene un coste de 2 millones más otros 3,8 de equipamiento tecnológico para el que buscarán fondos europeos, se vertebra en torno a 3 espacios de actividades sectoriales: el área marítima y offshore, el área metalmecánica y logística y el área de nuevos materiales. Todo ello con 3 ejes transversales: personas, para fomentar el talento; procesos para hacerlos eficientes y traer procesos nuevos y productos apoyando la certificación y homologación con laboratorios y centros tecnológicos, fomentando la creación de startups y spin-offs y sirviendo de centro demostrador y validador de productos.
A todo ello se sumarán 12 tecnologías tractoras que serán referencia para el centro y que son la realidad aumentada, realidad virtual, diseño rápido on line, diseño rápido demostrativo, modelos de simulación, impresión 3D, dispositivos de perímetro virtual, tecnologías 4.0 de unión remota, monitorización en continuo y trazabilidad, movilidad interna, manufacturing execution system y smart data.
Por otro lado, la Universidad transformará el edificio Faraday en un centro de investigación e innovación. El rector, Manuel Reigosa, explicó que están en marcha las negociaciones con la Consellería de Facenda, que se comprometió a aportar 3 millones, y que espera que en breve se produzca la firma de un convenio por el que el gobierno gallego certifique la dotación. El rector Reigosa también señaló en su momento que esperaba que el edificio “sirva para atraer más talento internacional y reforzar nuestras capacidades de investigación”. También allí se instalará la universidad de verano, así que se van definiendo los usos de un proyecto que ya está en marcha y que fue adjudicado a un estudio de Santiago, que también firma el proyecto de la sede de O Berbés, ya en marcha.
El tercer edificio es el Kelvin, donde se instalará el nuevo centro del Instituto de Investigaciones Marinas, que dejará el edificio de Bouzas en 2023 tras un largo camino. La mudanza ya se había planteado en 2003 pero luego llegó la crisis y hasta 2017 no hubo un acuerdo con la Xunta para alquilar la parcela con derecho a compra. El CSIC, del que depende Investigaciones Marinas, invertirá 16 millones de euros en el proyecto, que permitirá triplicar la superficie que actualmente tienen los investigadores en Bouzas.
La Escuela de Transmisiones de la Armada (ETEA) cerró en 2002 después de 86 años de actividad en Vigo. En 1951 las instalaciones de Teis tomaron el relevo de la Base Naval de Ríos creada en 1916.