Comprar coche nunca será más barato
[Vía La Voz de Galicia]
Descuentos de un 40 % y una media de 6.000 euros de rebaja darán paso desde el 1 de enero del 2020 a un alza de precios de los modelo de combustión hasta equipararlos a los eléctricos
Julio y agosto suelen ser meses de movimiento en los concesionarios. Hay más tiempo para comprar y buenas ofertas para dar salida a kilómetros cero y vehículos matriculados por las propias marcas en el primer semestre. Pero este verano se da una situación que difícilmente se volverá a repetir.
Por un lado, los concesionarios gallegos llevan desde septiembre del 2018 perdiendo ventas y, en los seis primero meses del 2019, el desplome del mercado es ya del 14,7 % (19.864 matriculaciones hasta junio). Para equilibrar la oferta con la demanda, las marcas están lanzando campañas de descuentos inéditas, que llegan hasta el 40 %. «La media se sitúa entre el 25 y el 30 %, que se traduce en una rebaja media de 6.000 euros por vehículo», afirman fuentes de la red comercial.
Por si esto fuera poco, los concesionarios acumulan más de 6.000 unidades automatriculadas en stock, que es más del doble de lo habitual, por esta caída de la demanda; y a esto hay que añadir que la Administración gallega acaba de anunciar un plan de achatarramiento con ayudas de hasta 1.500 euros.
Más caros en el 2020
Pero hay una circunstancia añadida, que tendrá un impacto sobre el precio de los coches a partir del 1 de enero del 2020. Es cuando entra en vigor la nueva normativa de la UE sobre reducción de emisiones contaminantes de dióxido de carbono en los vehículos. En ese momento, Europa exigirá a los fabricantes de coches que las emisiones medias de sus gamas no superen los 95 gramos por kilómetro. En caso de no conseguirlo, deberán pagar una multa de 95 euros por unidad vendida en el 2020.
«Hay crédito, hay consumo, hay buenas ofertas, pero hay miedo a elegir vehículo»
«Cualquier coche que se compre hoy contamina menos que los de más de 10 años»
Para evitarlo, las marcas necesitan que un 20 % de los coches que vendan el año que viene sean eléctricos, pero son mucho más caros. «La única forma de conseguirlo será subir el precio de los coches diésel y gasolina para equiparar los costes», aseguran fuentes de la red comercial.
Al final, según apuntan expertos y organizaciones, «la sanción la pagarán los clientes con una subida de los precios».