
El sector del metal sufre una caída del 12% en facturación y del 2% en empleo en 2020
- Los datos presentados por Asime muestran una fuerte afectación debido a la covid-19, con caídas del 12% en facturación y 2% en empleo.
- Aunque el 2020 ha dejado datos negativos en la industria del metal y sus tecnologías asociadas, el sector confía en comenzar a ver cifras de recuperación a partir del segundo semestre del año 2021.
El sector metal gallego sufrió en 2020 un fuerte impacto de la pandemia del covid-19.
Las distintas actividades representadas en el metal emplearon a más de 57.0000 trabajadores, un 2% menos que en 2019, y generaron una facturación de 12.038 millones de euros, lo que supone una caída histórica del 12%.
Aun así, el sector continúa siendo eje vertebrador de la economía gallega, representando el 20% del PIB.
La balanza comercial fue positiva pero también por debajo del crecimiento esperado, con unas exportaciones que se incrementaron un 14,5% mientras que las importaciones cayeron un 8,7%.
En general, todo el sector se ha comprometido de forma contundente con la prevención y también con la retención de talento, haciendo un esfuerzo por mantener el empleo a pesar de las fuertes caídas en facturación. En general, las empresas del sector han intentado resistir el envite de la crisis tirando de contratos ya cerrados y diversificando su actividad, confiando en que este 2021 se pueda asistir ya a cierta recuperación derivada de la vacunación y el descenso progresivo de la incertidumbre económica.
Afectación por actividades
- Por sectores, la automoción marcó récord histórico de producción, tirando del empleo y facturación con crecimientos del 1% y 2% respectivamente.
- Las construcciones y estructuras metálicas fueron otra de las industrias que mejor aguantó la crisis del covid en 2020, registrando una caída del 2% en empleo y aumentando un 3% la facturación.
- En el otro extremo se encuentran el naval y la aeronáutica. La industria de la construcción y reparación naval cerró el 2020 con una caída del 30% en facturación y del 6% en empleo. Se trata de un mal año para esta industria, que vio caer su cartera de pedidos en un 33% y cerró un 75% menos de nuevos contratos.
- Por su parte, la aeronáutica sufrió un golpe sin precedentes debido a la caída histórica en el tráfico aéreo a nivel mundial. Esto ha llevado a las empresas del sector a cerrar el año con caídas del 40% en facturación y del 2% en empleo, intentando retener talento con la esperanza puesta en la recuperación.
Retos
Ante esta situación, Enrique Mallón, Secretario General de Asime, destacó algunos puntos clave:
«Estamos ante un momento crítico en el que se necesitan inversiones y una apuesta contundente por la industria. Al mismo tiempo, es preciso ordenar la transición energética con un plan coherente en el que no se permitan cierres sin alternativas, a la vez que se apuesta por industrias estratégicas y se les ofrecen condiciones atractivas para instalarse en nuestra región, que cuenta con enormes posibilidades en áreas tan diversas como eólica marina, la aeronáutica o la automoción».
«Tenemos en los fondos europeos una oportunidad que no podemos perder en el sector metal gallego. Desde Asime estamos impulsando ya más de 15 proyectos y trabajando en muchos más con las empresas del sector. Tenemos que movilizarnos y trabajar por atraer esas inversiones para nuestra industria»
Así mismo, desde Asime destacan los retos que suponen la movilidad del futuro, la digitalización, el impuesto de matriculaciones o la falta de microchips, que son claves para marcar la tan esperada recuperación.
«A la vez, todo el sector en general necesita atraer inversiones, y este es un reto en el que debemos trabajar desde el sector privado y también desde todas las administraciones, ofreciendo las facilidades e incentivos necesarios para que se apueste por la industria en un territorio con enormes posibilidades como es Galicia».